La listeriosis es una infección alimentaria poco frecuente, pero que puede llegar a causar que una persona tenga que ser hospitalizada si injiere alimentos contaminados por esta bacteria conocida como la Listeria, que es la que la produce.
En principio la sintomatología es normalmente moderada y puede confundirse con una gastroenteritis, en cambio, cuando esta infección ataca a grupos de población más vulnerables como los ancianos, los síntomas pueden ser más agudos.
En este artículo vamos a mostrarte en profundidad qué es la listeriosis y los síntomas que produce, tanto en los ancianos como en la población en general en caso de un posible contagio.
¿Qué es la listeriosis?
La listeriosis aparece al ingerir alimentos que contienen la bacteria científicamente llamada Listeria Monocytogenes.
Una bacteria que puede presentarse en:
- Animales domésticos o salvajes.
- El agua.
- Los suelos.
- Alimentos crudos o cultivados en suelos contaminados.
Asimismo, es importante saber que la listeriosis no es ninguna enfermedad, ya que se trata de una infección que con un correcto tratamiento, prescrito por un médico especialista, remitirá pasado un tiempo.
¿Cómo se desarrolla la Listeria?
Para que la Listeria crezca, su hábitat ideal ronda una temperatura óptima entre 30 y 37 grados, pero esta bacteria, también puede crecer en torno a los cuatro.
Además, la Listeria produce una toxina que, camuflada con el colesterol, puede llegar a infectar las células sin dañar la membrana plasmática que las rodea.
De esta forma, las bacterias viven de manera intracelular y se protegen de factores extracelulares del sistema inmunológico como los anticuerpos.
Sin embargo, la Listeria es un microorganismo sensible a un gran espectro de antibióticos, por lo que, si creemos que podemos haber contraído esta bacteria, tendremos que dirigirnos a nuestro médico para que nos prescriba el tratamiento indicado.
Listeriosis: síntomas para la detección
Los síntomas de la listeriosis pueden presentarse de forma más aguda en bebés, mujeres embarazadas o adultos mayores, ya que su sistema inmunológico es más débil.
Además, dependiendo de qué órganos hayan sido afectados en el organismo los síntomas de la listeriosis variarán.
Estos son los más comunes:
- Inapetencia.
- Falta de energía o cansancio.
- Dificultad para respirar.
- Náuseas, vómitos o diarrea.
- Erupción cutánea.
- Pérdida o problemas de equilibrio.
- Dolor de cabeza.
- Fiebre o escalofríos.
- Dolores musculares.
- Rigidez en el cuello.
- Conjuntivitis.
De otro lado, en casos más graves podemos encontrar infecciones como:
- Infección del corazón (endocarditis).
- Infección del cerebro o del líquido cefalorraquídeo (meningitis).
- Infección de la sangre (septicemia).
Hay que saber que todos estos síntomas pueden verse agravados cuando la persona que los padece se encuentra dentro de un grupo de riesgo.
En mujeres embarazadas una infección de este tipo puede suponer un aborto espontáneo o que el feto contraiga la bacteria de la Listeria. Incluso, existe la posibilidad de que el recién nacido pueda nacer sin vida o la pierda minutos después de nacer.
En el caso de los ancianos suelen aparecer síntomas graves como: neumonías, meningitis, septicemia o abscesos. Por lo que los afectados tienen que estar atentos a cualquier rasgo de sintomatología leve porque, en caso de no ser tratada de manera temprana, podría empeorar.
Cómo saber si tengo listeriosis
El primer paso para detectar si la persona ha sido infectada por la bacteria de la listeria es observarse y ver si presenta los síntomas que la listeriosis puede causar.
Si en algún momento la persona cree que ha podido consumir algún alimento en mal estado o que tuviese esta bacteria, debe contactar con el personal socio-sanitario lo antes posible para que le realicen un diagnóstico.
¿En qué alimentos puede aparecer la listeria?
La listeria puede aparecer sobre todo en alimentos crudos, es lo más común, pero también puede presentarse en alimentos procesados y los que hayan sido cultivados con abonos naturales contaminados de Listeria. Los productos lácteos o cárnicos sin pasteurizar también pueden contenerla.
Cómo evitar la listeriosis
Para evitar contagiarse de listeriosis, es esencial que las personas sigan una serie de pautas para no contaminar los alimentos como:
- Mantener una buena higiene: hay que lavarse bien las manos con agua caliente y jabón antes y después de manipular alimentos.
- Lavar bien las frutas y verduras: existen productos específicos para su lavado, pero una opción más casera será lavarlas con abundante agua.
- Separar los alimentos: a la hora de refrigerar o almacenar los alimentos hay que separar bien todos los productos cárnicos crudos de las frutas o verduras para evitar la contaminación cruzada.
- Utilizar distintas tablas en la cocina: los expertos recomiendan utilizar tablas de cortar o cuchillos diferentes para cada tipo de producto.
- Lavar los utensilios de cocina con agua caliente: utilizar un lavavajillas es la opción ideal, pero si no es posible, lavar los utensilios con agua bien caliente.
- Comprobar el origen de los alimentos: es vital comprobar y verificar el origen de los productos que has comprado.
Cómo se contagia
La listeriosis no se contagia de una persona a otra ni tampoco se contagia por vía aérea. Para contraer esta infección, los afectados tienen que haber ingerido un alimento contaminado.
De otro lado, en el caso de mujeres embarazadas sí es cierto que pueden transmitir la listeriosis al feto.
Brotes de listeriosis en España
Uno de los brotes de listeriosis en España, con mayor repercusión mediática, ocurrió en Andalucía en agosto de 2019. Las autoridades sanitarias de la comunidad autónoma andaluza notificaron que éste fue causado por la comercialización de una marca de carne mechada.
A raíz de este brote de listeriosis, 222 personas se infectaron de Listeria Monocytogenes en esta comunidad y otras más como Aragón, Extremadura, Castilla y León y Madrid por culpa de la carne mechada contaminada.
Con la colaboración de la empresa distribuidora junto con las respectivas autoridades sanitarias, se emitieron comunicados para retirar todos los productos que comercializaba dicha empresa hasta valorar los puntos en los que esta bacteria podía haberse introducido en la cadena de producción.
La listeriosis en personas mayores y ancianos
Los ancianos son uno de los grandes grupos de población de riesgo frente a la listeriosis, de hecho, los Centros para el Control y la prevención de Enfermedades indican que más de la mitad de las infecciones por listeria se dan entre personas de más de 65 años.
La razón principal de esto se encuentra en su sistema inmunitario, ya que al envejecer, éste se deteriora y se vuelve más débil, y la capacidad de que sea capaz de eliminar determinados microbios también disminuye.
Además, algunos pacientes padecen diabetes u otro tipo de afecciones crónicas y la medicación para estas enfermedades puede deteriorar todavía más su sistema inmunitario, por lo que tienen más posibilidades de contagiarse.
Tratamiento de la listeriosis
El tratamiento de la listeriosis variará en función de la gravedad de los síntomas que se presenten. Cuando se produce una infección más grave es habitual tratarla con antibióticos, prescritos por el médico, tras tener un diagnóstico claro.
Esperamos que ahora que ya sabes qué es la listeriosis y sus síntomas, sepas distinguirla de una simple gastroenteritis, por ejemplo, en el caso de que sufras alguno de ellos o algún familiar los presente.
Igualmente, recomendamos a las personas vayan con especial cuidado a la hora de consumir alimentos como los descritos en este artículo sobre la listeriosis.