¿A qué se debe el frío interno en el cuerpo de las personas mayores? Consejos para actuar

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Con la llegada del invierno pueden darse problemas de salud típicos de la bajada de temperaturas. Pero, además, un común denominador en algunas personas mayores es la sensación de frío interno constante, que tiene sus causas definidas.

En ocasiones, por más que una persona mayor se abrigue, no cesa la sensación de frío interno en el cuerpo, por lo que conviene poner atención para saber dónde puede estar el origen de esa peculiaridad.

Frío interno en el cuerpo del anciano: causas

En primer lugar, hay factores genéticos que intervienen en este aspecto: cierta tolerancia al frío se transmite de manera hereditaria. Pero también son claves algunas características corporales.

Por ejemplo, la piel grasa ofrece una mayor protección contra las temperaturas externas, a la vez que ocasiona que la pérdida de calor interno sea menor. Por lo tanto, las personas de piel menos grasa, es decir, más seca, tienden a sufrir más el frío.

Asimismo, el metabolismo también puede ser una causa a tener en cuenta. De esta forma, los índices más elevados de grasa corporal y masa muscular también protegen del frío.

Esto se debe a que, en esos casos, la tasa metabólica basal, que es la cantidad mínima de energía que una persona en reposo necesita para vivir, es mayor, lo que hace que se genere más calor.

Es por ello que las personas más delgadas y las mujeres tienden a ser más frioleras que las personas más robustas y los varones

Otra de las causas del frío interno en el cuerpo en personas mayores son las variaciones hormonales. Especialmente, durante la menopausia.

Seguidamente, para saber por qué se tiene frío interno en el cuerpo en edades avanzadas conviene no dejar atrás a la circulación. Una mala circulación sanguínea tiene como consecuencia que la sangre no llegue en cantidad suficiente a todas las partes del cuerpo, en especial a las manos y los pies. Esto hace que su temperatura sea más baja y aparezca una sensación de frío que no se limita a las extremidades sino que abarca todo el cuerpo.

Por otra parte, una dieta pobre en nutrientes en particular de vitamina B12, cuya escasez reduce la cantidad de glóbulos rojos y perjudica la correcta oxigenación del cuerpo, puede ser responsable de que un adulto mayor padezca una constante sensación de frío.

El blog de Sanitas también alerta de una de las causas que subyace: uno de los cambios propios del envejecimiento, como es el adelgazamiento de la piel, con una propensión a la sequedad, que conlleva una pérdida de la función de los receptores cutáneos de la temperatura, dificulta la percepción de la temperatura ambiente y, por tanto, la capacidad de afrontar los cambios bruscos de temperatura. De ahí la necesidad de vigilar con mayor cuidado la temperatura de las casas en las que viven personas mayores.

Un anciano postrado en el sofá de su casa con una manta.

En primer lugar, una de las principales enfermedades que producen frío en el cuerpo es la anemia. La anemia es una condición que se caracteriza por el déficit de hemoglobina en la sangre. Esta es una proteína que sirve para transportar el oxígeno en el cuerpo.

Por otra parte, la ansiedad es otro factor que puede generar la sensación de una baja temperatura. Principalmente esto se siente en las extremidades.

La diabetes en personas mayores es otra de las enfermedades que producen frío en el cuerpo. Lo mismo pasa con otras enfermedades que afecten a la coagulación de la sangre.

Del mismo modo, también pueden tener sensación de frío personas con una mala salud general o que estén atravesando alguna enfermedad grave.

Por último, el consumo de ciertos medicamentos orientados a enfermedades cardiacas puede estar asociado a la sensación de frío.

Un anciano se coloca las manos en la cabeza en claro síntoma de estrés.

Existen varios consejos y varias formas de vida para intentar combatir el frío interno que sufren los ancianos en épocas frías y de cambios bruscos de temperatura:

  • Ventilar unos 10 minutos la casa en las horas de más calor. Con esto se evitará un cambio brusco de temperatura al salir a la calle y el cuerpo se acostumbrará mejor al clima.
  • Buena nutrición del cuerpo. Es de vital importancia tomar vitaminas C y D, son las mejores para combatir los virus. Alimentos como legumbres, frutas, carnes y pescado ayudarán  a mantener una salud adecuada en épocas difíciles.
  • Realizar actividad física diariamente. El ejercicio físico diario mantiene activos a los adultos mayores y aumenta la sensación de calor corporal.
  • Cuidado con los sistemas de calor en los hogares. Deben estar en el punto justo de temperatura y no deben estar todo el día encendidos ya que emiten gases tóxicos.

Siempre que disminuye la tempera ambiente aumenta el riesgo de contraer enfermedades tales como un resfriado o una gripe, por lo que, y especialmente en tiempos de más frío, conviene tener especial cuidado con la sensación de frío en el cuerpo del anciano, puesto que en edades avanzadas son personas más vulnerables.
Comentarios para ¿A qué se debe el frío interno en el cuerpo de las personas mayores? Consejos para actuar

Un comentario

  1. Buenas tardes, a pesar de considerarme una persona con mucha energía por ende caliente sufro de un frío interior en la espalda baja, siento marcada como un cuadrado con dos pilares a los lados, no se calienta con nada a pesar de friccionarse, darle calor con bolsa de agua, y abrigar ese sector con envilturas de prendas de lana. Gracias

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