Aromaterapia para personas mayores: beneficios

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Daniel Ibiza

Por: Daniel Ibiza

CEO-fundador, trabajador social

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El sentido del olfato tiene un gran poder a la hora de evocar sensaciones y recuerdos. Hasta tal punto eso es así, que incluso se ha creado el término ‘aromaterapia’. Esta técnica puede emplearse en casos de personas con algún tipo de problema de salud, ya sea físico o mental.

Cabe destacar que el conocimiento sobre los beneficios que ofrecen determinados aromas no es algo que se haya puesto de moda de repente. Es bastante común encontrar hierbas medicinales como el romero, la manzanilla, la salvia o la menta en los hogares de personas mayores.

Los aceites esenciales pueden ser una ayuda muy valiosa para mejorar la calidad de vida los adultos mayores, tanto por el efecto que tienen los aromas sobre el estado anímico, como por su función beneficiosa en el organismo.

Gracias a su compleja composición química, estas hierbas medicinales se convierten en potenciales antibióticos naturales.

Sobre todo en el caso de personas mayores que permanecen un tiempo prolongado encamadas, es bastante habitual encontrar elementos de aromaterapia en la habitación, como es el caso de los difusores de aceites esenciales. Estos pueden favorecer el buen humor, lograr un efecto purificador y balsámico, o incluso generar un efecto relajante.

¿Qué es la aromaterapia?

La aromaterapia está considerada como una de las técnicas de relajación más antiguas. Se basa en la utilización de aceites esenciales, los cuales tienen diversos beneficios para la salud, tanto físicos como psicológicos. Estos se extraen de plantas, cortezas, hierbas y flores naturales.

De esta forma, se puede definir la aromaterapia como un ciencia milenaria que consiste en la combinación de extractos de aceites esenciales de plantas aromáticas, que ayudan a crear equilibrio y armonía, así como a promover la salud del cuerpo, de la mente y del espíritu.

Una anciana huele una hierba medicinal.

Los masajes en la aromaterapia

Un masaje se basa en el uso hábil de las manos para manipular el tejido blando con el propósito principal de aliviar la tensión muscular y estimular la circulación sanguínea.

Éste nace del instinto humano de buscar contacto con la piel a través del tacto y la frotación, con el fin de ofrecer una sensación de bienestar fisiológico a otra persona.

Un masaje con aromaterapia es un método que incorpora aceites esenciales en el sistema de amasamiento de músculos y tejidos blandos del cuerpo. Su finalidad es aliviar las condiciones médicas y las lesiones y preservar el bienestar general.

Además, una de las particularidades de los masajes de aromaterapia es que el profesional que los lleva a cabo hace especial hincapié en la selección del aceite esencial adecuado, pues su elección depende de sus propiedades terapéuticas y de la finalidad de dicho masaje.

Aromaterapia para la ansiedad

Los aceites esenciales para tratar la ansiedad en las personas mayores se han convertido en un eficaz tratamiento complementario que ayuda a reducir niveles altos de estrés.

La aromaterapia también puede utilizarse a diario como un método de relajación, o incluso como prevención ante situaciones que causen estrés, tales como presentar discursos o vivir grandes emociones.

Las moléculas aromáticas de los aceites esenciales se inhalan por la nariz y se transmiten, a través del bulbo olfativo, hasta el sistema límbico del cerebro.

Esta es la región cerebral que controla el sistema nervioso y el hormonal, así como la memoria y el comportamiento emocional.

Un plano detalle de unas manos de un anciano recogiendo unas hierbas del campo.

Estas moléculas se combinan para crear fragancias distintivas que contienen las propiedades curativas específicas de cada aceite. Los aceites esenciales se inhalan a través de los siguientes métodos:

  • Inhalación directa: una banda aromática o una botella de aceite esencial diluido se coloca 10 cm por debajo de las fosas nasales y se realizan varias inhalaciones profundas para permitir que las moléculas aromáticas ingresen por la nariz hasta llegar al sistema límbico en el cerebro.
  • Dispersión: los aceites esenciales se rocían en la ropa de cama, muebles, pañuelos de papel y de bolsillo y, de este modo, las moléculas aromáticas son inhaladas.
  • Evaporación: unas pocas gotas de aceites esenciales se combinan con agua y se apoyan sobre una fuente de calor segura. El calor hace que las moléculas aromáticas, al ser volátiles, se difuminen en el ambiente para lograr una inhalación sutil. Quemar aceites esenciales es una forma efectiva de desinfectar el aire y repeler insectos.

Existen otros mecanismos más allá de las hierbas esenciales para llevar a cabo la aromaterapia, como por ejemplo, el uso del humidificador en personas mayores, que simula los efectos relajantes y es usado en muchas de las terapias.

Aromaterapia para dormir: muy importante en la vejez

Otro de los usos de la aromaterapia en la tercera edad es la de ayudar a dormir.  Los sentimientos de estrés, problemas no resueltos, tensión e inseguridad a veces impiden lograr un sueño profundo y reparador.

Para alcanzar este estado de relajación, los aceites de aromaterapia pueden convertirse en una herramienta ideal, ya que ayudan a disipar de manera gradual esa sensación de estrés acumulado.

De esta forma, existen algunas esencias que ayudan a respirar mejor y a llegar a un nivel de relajación óptimo para lograr el sueño.

El efecto saludable del aceite esencial de pino es un buen ejemplo de que se puede aprovechar la aromaterapia para asegurar un sueño saludable, ya que calma el sistema circulatorio y promueve un sueño más profundo.

La aromaterapia para ayudar a dormir se puede llevar a cabo mediante:

  • Lámparas aromáticas.
  • Baños de aromas.
  • Almohadas aromáticas.

Un plano de una cama de matrimonio con una mesilla de noche con una lámpara aromática.

Algunas de las esencias que ayudarán a dormir y a combatir la agitación mental son: la bergamota, la camomila, la lavanda, el incienso, el sándalo o la rosa. Otras fragancias relajantes son, por ejemplo, el aceite amargo, la melisa o el geranio.

En conclusión, la aromaterapia puede servir de gran ayuda para tratar los trastornos de ansiedad. Los estudios sobre la prevalencia de los trastornos de ansiedad en las personas mayores de 65 años muestran resultados variables, que oscilan entre un 0,1 y un 17,2%, por lo que incluir técnicas como la aromaterapia pueden ayudar a paliar este problema de salud.

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